Las últimas declaraciones de Ana Botella me han provocado una rara sensación de risa e indignación, no a partes iguales, por supuesto. Por eso e inspirada por una iniciativa aún un poco verde de la Plataforma Actuable, le he escrito una carta, muy comedida, a la alcaldesa, Ana Botella, para sugerirle que se postule ella como Voluntaria de Honor renunciando a su sueldazo. Finalmente, por si alguno de mis numerosos seguidores se anima a hacer lo mismo, me he decido a publicarla en este blog.
Estimada Alcaldesa,
Me dirijo a usted para elevar mi protesta por sus recientes declaraciones relativas a lo deseable que sería que los madrileños nos implicáramos como voluntarios en labores culturales, medioambientales, etc... Añade usted también que ya es hora que le devolvamos a la sociedad lo que ella nos ha dado.
Con todos mis respetos, le aconsejo que piense un poco antes de hacer según que sugerencias para salir de la crisis porque no sé si sabe que, aparte de haber una ley del voluntariado que regula perfectamente qué labores pueden llevar a cabo los voluntarios -y desde luego el mantenimiento y puesta en marcha de centros culturales y deportivos no entran esa categoría- los ciudadanos pagamos un dinero en concepto de impuestos que está precisamente destinado a que sea el Ayuntamiento a través de sus trabajadores el que lleve a cabo estas funciones. Es decir que el consistorio es el que nos tiene que devolver en forma de servicios lo que nosotros hacemos por él, que no es ni más ni menos que pagar los tributos municipales correspondientes.
No sé si tiene usted claro que todos los servicios que el ayuntamiento nos presta están previamente pagados de nuestros bolsillos.
Así que no se equivoque, su gobierno no nos está regalando nada como para que nos sintamos deudores y nos pongamos a trabajar gratis.
Pero para que esta carta no se quede en la pura crítica le voy a hacer alguna sugerencia para ahorrar dinero. La primera es que usted y su equipo de concejales se conviertan en servidores voluntarios y renuncien a su sueldo. ¿Qué le parece? En su caso no sería un problema puesto que su marido percibe varios sueldos entre los que está el de ex-presidente del gobierno que le pagamos todos los españoles. En cuanto a sus concejales no lo sé, pero seguro que se les podría bajar el sueldo sustancialmente sin que sufriera demasiado su economía doméstica.
La segunda sugerencia es que renuncie a presentar la candidatura de Madrid como sede olímpica. Con este vano y enésimo intento lo único que están ustedes consiguiendo es vaciar las arcas municipales y engrosar los bolsillos de mucha gente perfectamente prescindible para el buen funcionamiento de la ciudad de Madrid. ¿No cree que es precisamente este el momento de centrarse en los muchísimos problemas que tiene esta ciudad y no en insistir en sueños gloria más propios de épocas de bonanza?
Otra de las sugerencias es que intente defender a los pequeños empresarios de la ciudad de Madrid que verán bajar sus cada vez más escasos beneficios con la nueva ley de libertad de horarios. Estudie por favor en profundidad cuáles serán las consecuencias de la entrada en vigor de esta ley para los madrileños. Pero no solo para los consumidores –que por otra parte poco podemos consumir ya- sino para los autónomos y los trabajadores de las pequeñas empresas de nuestra capital. Eso sí ayudaría a combatir la crisis.
Por favor no nos tome por tontos y póngase a trabajar de un modo serio por el bien de esta ciudad.
Atentamente.
La que suscribe
